La plantilla se conjura ante el reto más importante del club ilicitano en los últimos 23 años
"Todos para uno y uno para todos". Esa era el lema de Athos, Porthos y Aramis, los tres mosqueteros en la novela de Alejandro Dumas, y de D`Artagnan, que hacen suyos los jugadores del Elche en vísperas de los quince días más importantes del blanquiverdismo en los últimos 23 años. El ascenso a Primera División está a la vuelta de la esquina y la plantilla desea concentrarse al máximo para conseguir su objetivo. Para ello, no quiere meterse ningún tipo de presión encima, aboga por ir partido a partido con humildad y trabajo. Esa es su bandera, la que ha ido ondeando a lo largo de toda la campaña y que ha lucido forma perfecta en todos los rincones.
El murciano Kike Mateo es la voz de la experiencia dentro de un vestuario franjiverde ilusionado. Lleva muchos años de vuelo en este mundillo futbolístico y sabe que hay que tomarse estos partidos tan importantes de la promoción de ascenso a la máxima categoría con tranquilidad.
A su juicio, "partimos con un 25 por ciento de posibilidades de conseguir el objetivo. Veo a los cuatro equipos muy parejos, cada uno con sus virtudes y carencias, y todo se va a decidir en pequeños detalles". Huye del favoritismo y afirma que "salvo el Barcelona, nadie, en el mundo de fútbol, puede decir que es favorito. Ahora, lo anterior vale para muy poco y el que mejor maneje los pequeños detalles se llevará el gato al agua".
Entiende que "el Valladolid tiene una gran plantilla, muy competitiva, pero nosotros no vamos a ser menos. Ahora es el momento de darlo todo en dos semanas. Inicialmente van a ser 180 minutos donde debemos estar sumamente concentrados. Somos un equipo que no sabe especular y como tal vamos a salir a ganar desde el primer minuto".
Al contrario que algún compañero, a Kike Mateo le gusta más jugar el segundo partido de la eliminatoria en casa. "En el caso de una prórroga puedes tener más minutos en tu feudo y ante tu afición. Pero, ahora, hay que pensar en el partido de Zorrilla y el once que salga darlo todo y no asustarse por la presión que pueda existir", insiste.
El mediapunta reconoce que "a mitad de temporada nadie pensaba que el Elche iba a llegar tan lejos. Poco a poco hemos ido cumpliendo nuestros objetivos. Nos queda la recta final y en doce o trece días podemos estar en Primera División jugando con los mejores jugadores del mundo. Eso sería un éxito para toda la plantilla, para la afición, para la ciudad...algo magnífico. Por ello vamos a luchar".
A nivel personal Kike Mateo reconoce que "cada día me encuentro mejor y me agradó que me aplaudieran cuando abandoné el campo. Pero ni los elogios pueden relajarte, ni los pitos hundirte. Hay que saber quién eres y trabajar duro en los entrenamientos para luego estar a tope en los partidos".
Está seguro que la afición se va a volcar con el equipo el próximo domingo en el partido decisivo ante el Valladolid. "Elche es una ciudad futbolera y la afición está con muchas ganas de disfrutar con un ascenso".
Su compañero, Cristóbal Márquez, señaló que durante el partido ante el Xerez disputado el sábado "se demostró que toda la plantilla está enchufada y va a ser difícil que nos paren".
"¿Qué han dicho que somos el equipo chollo de los que jugamos la promoción? Que digan lo que quieran. Lo que tienen que hacer es demostrar en el campo que son mejores que nosotros", añadió el futbolista madrileño.
Por su parte, David Generelo consideraba ayer que "las sensaciones son positivas, que se ha hecho una buena de temporada y que llegamos en un gran momento a la promoción. Pero, todo lo hecho hasta ahora vale para poco. Estos partidos van a ser de mucha tensión y debemos ser capaces de ser calientes a la hora de afrontar los partidos al máximo nivel, pero sin dejar de lado la sangre fría en momentos determinados".
El centrocampista pacense entiende que "el mejor resultado que nos podemos traer de Valladolid es la victoria y con esa intención vamos a salir. En los 180 minutos que nos quedan por delante debemos ser capaces de pasar a la siguiente eliminatoria y en esa tarea estamos".
Bordalás sólo tiene la baja de Vasco Fernandes
La plantilla del Elche regresó ayer por la mañana al trabajo tras descansar el domingo y el entrenador franjiverde José Bordalás tiene a su disposición a todos sus jugadores salvo al lateral derecho Vasco Fernandes. El mediapunta Miguel Palanca ha superado la rotura muscular en el gemelo de la pierna derecha, que le ha tenido parado más de un mes, y ayer trabajó al mismo ritmo que el resto de la plantilla ilicitana sin resentirse. Mientras, el portugués Vasco Fernandes es baja para el partido de ida de la primera eliminatoria de la promoción de ascenso por un esguince de grado 1 en el tobillo izquierdo, que se hizo durante el encuentro de la última jornada de liga regular, contra el Xerez, tras recibir una dura entrada del punta rival Bermejo. Ayer, Sergio Mantecón y Ripa trabajaron al margen del grupo, pero, en principio, no tendrán problemas para jugar en el Nuevo José Zorrilla. Los futbolistas del conjunto franjiverde entrenan esta mañana y lo harán el miércoles antes de volar en dirección a Valladolid al mediodía en un vuelo chárter donde sólo viajarán los futbolistas y el cuerpo técnico. Bordalás tiene previsto entrenar en la mañana del jueves, día del partido, con sus pupilos en las instalaciones del conjunto castellano. Apuntar que hoy se hará oficial un viaje que tiene previsto realizar la Agrupación de Peñas del Elche a Valladolid por lo que el equipo no estará solo en su primer duelo de la promoción de ascenso a Primera División. Además, se van a poner a la venta esta mañana las entradas que ha enviado el equipo de Pucela para dicho encuentro en el Nuevo Zorrilla. El precio de ellas es de 25 euros.
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