Como viene ocurriendo cada año antes del inicio de la temporada futbolística, aunque la norma se ha roto en esta ocasión por cuanto ya ha comenzado, la 'gran familia' del Elche CF acudió a la Basílica de Santa María para postrarse a los pies de la Patrona, la Virgen de la Asunción, para que todo transcurra felizmente, y a poder ser que se consiga el tan deseado ascenso.
Las plantillas del primer equipo del Elche, Deportivo Ilicitano y Elche Juvenil, con el presidente, José Sepulcre, y miembros del consejo de administración hicieron acto de presencia en el templo ilicitano, acompañados por la alcaldesa, Mercedes Alonso, y el concejal de Deportes, Daniel Rubio. Eso sí, el acto empezó con 25 minutos de retraso.
Ofició la ceremonia religiosa el 'pater' del Elche, reverendo Javier Parreño, que estuvo auxiliado por el arcipreste José Luis Úbeda, que tuvo el deseo de compartir el acto.
En su densa homilía, el ofertante hizo votos por la temporada ya empezada, «cosa que habéis hecho con muy buen pie», y una vez finalizada la ceremonia religiosa, se cantó la tradicional salve a la Patrona y se subió al Camerín de la Virgen, donde los capitanes -Generelo, del primer equipo, Yerai del filial y Óscar del juvenil-, depositaron a sus pies sendos ramos de flores.
El arcipreste dirigió unas palabras señalando que acaba de llegar de una peregrinación a Santiago al que acompañaba un autobús con el escudo del Elche. «Mucha gente se mira en vosotros, sobre todo los pequeños», recordó, al tiempo que invitaba a los fichajes a «una ciudad muy acogedora».
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