Un derbi, dos colores

Jugarán los onces de gala. Albacar, peligro visitante

Hacía muchos años que un derbi entre el Hércules y el Elche no se sentía así. Hay pasión en ambas ciudades. Ilusión por batir al eterno rival. Ganas de vacilar al amigo del otro bando. Y es que el ascenso herculano de hace dos años y el playoff franjiverde del curso pasado, han hecho florecer en las aficiones un sentimiento de arraigo sin precedentes, una sensación de apego por sus colores. La prueba es que las entradas que el Hércules destinó para los seguidores ilicitanos se han quedado cortas. Hacía décadas que no pasaba eso. Cierto es que hace dos cursos viajaron 8.000 herculanos a Elche pero entonces los franjiverdes aún no estaban tan enchufados como ahora.

Se dan las circunstancias idóneas para que se viva el mejor derbi de los últimos tiempos: hinchadas entregadas, los equipos muy arriba, precios asequibles, césped de lujo, tiempo primaveral... Con todo este caldo de cultivo, el Rico Pérez presentará un aspecto de lleno, aunque seguramente quedarán entradas hasta el final.
Caliente.
De entrada, será un derbi de sentimientos, de colores muy sentidos. El blanquiazul del Hércules y el verde del Elche (hoy entero gracias Miranda Torres). Tras el partido, seguramente una tonalidad dominará a la otra. Será un clásico caliente, dados los antecedentes y la idiosincrasia de ambas plantillas. Los dos técnicos pondrán sus onces de gala. Toda la carne en el asador. Mandiá recupera a Samuel y Peña para formar su muro infranqueable atrás y podría repetir de centro del campo para arriba. Urko apunta a titular pese a que Aganzo ya está a tope. El madrileño estuvo cerca de ser franjiverde en verano. Acabó en el Hércules y hoy quiere estrenarse ante el eterno rival. No será titular pero tendrá minutos seguro. En el campo se encontrará con Albacar, amigo de su etapa rayista y que vuelve tras sanción. Mandiá teme el golpeo a balón parado del catalán. Ahí se librará una batalla extrema. Etxeita será la otra novedad.
El Rico Pérez rozará el lleno y habrá 2.000 ilicitanos en las gradas
El estadio Rico Pérez presentará la mejor entrada de la temporada. De hecho, el aspecto recordará a la mayoría de los partidos de la pasada temporada, en Primera División. El cartel de No hay billetes será difícil que se cuelgue pero el aspecto general será de lleno. Más si cabe, después de que el club haya regalado más de 2.000 localidades de Preferente Alta con la compra de una bufanda por 10 euros. Los packs de entradas 2x1 para abonados también se han despachado a buen ritmo. Por su parte, tras la negativa del Hércules a mandar más entradas al Elche, por motivos de seguridad, muchos aficionados franjiverdes se han acercado en las últimas horas a Alicante para comprar su entrada. Así, además de los 1.500 que viajarán con ticket oficial, unos 500 más podrían estar mezclados con la afición local, por lo que habrá que extremar las precauciones para evitar incidentes.
Claves del partido
Gran ambiente
El Rico Pérez estará casi lleno. La afición local será mayoría pero el Elche estará arropado por 2.000 seguidores.
Tapiz perfecto
El terreno de juego es una alfombra. No hay excusas. Los jugadores con mayor calidad tendrán ventaja con este césped.
Balón parado
Edu Albacar, fundamental en el Elche en la estrategia. En el Hércules, Carlos Calvo y Callejón serán los ejecutores.
Ases a seguir
Urko Vera
Sus tres goles en Liga han significado nueve puntos. Siempre que marca su equipo gana por la mínima.
Xumetra
Está en estado de gracia. Habrá un choque de trenes en banda con Peña. El catalán está rapidísimo.
Altas y bajas
Escassi, con pubalgia, y Tote, están lesionados. Vuelven Míchel, Peña y Samuel.
Generelo y Paños están lesionados. Regresan Edu Albacar y Etxeita. Bordalás hará tres descartes.
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